¿Te cortas, te bloqueas, te cuesta relacionarte fácilmente con los demás?
¿Te sientes torpe o estúpido cuando estás en un grupo y no sabes qué hacer o qué decir?
Hoy vas a descubrir un truco de dos sencillos pasos que te va a aliviar esa sensación, y la próxima vez que veas a alguien sí vas a saber qué hacer o qué decir. ¿Te imaginas que gracias a esta técnica sencilla que voy a contarte te surgen nuevos amigos o conoces a la chica de tus sueños? No subestimes nunca el poder de la sencillez 🙂
Recientemente hice una pequeña encuesta en el grupo de Facebook que abrí hace poco, y pregunté sobre qué temas les interesaban que les hablara. La opción más votada fue “Relacionarse fácilmente con los demás”, quedando por encima de los temas “Amor de pareja” o “Aventuras sexuales”.
¡Vaya! Yo que pensaba que todos iban a decir, ¡aventuras sexuales, aventuras sexuales! Pues no. Me equivoqué. Para que luego digan que siempre estamos pensando en sexo. Se ha caído un mito…
Pues bien, aquí escribo este post para ayudarte a que te relaciones mejor, si ése es tu caso.
Inicia una conversación fácilmente con los demás en dos simples pasos
Antes de nada, vamos a aclarar dos cosas importantes:
¿Es lo mismo que te relaciones fácilmente, que tengas buenas relaciones?
Por ejemplo, ¿si eres un relaciones públicas, significa que tienes mejores relaciones?
No, significa que te relacionas muy fácilmente los dos primeros minutos, que se te da muy bien lo de un saludo efusivo, cálido, cercano y breve; lo de un “qué tal cómo te va todo”, un “me alegro de verte”, y un “a ver si quedamos un día para comer”, y ¡hasta luego!
¿Eso es tener buenas relaciones?
Más bien podríamos llamarlas “relaciones de fuegos artificiales de dos minutos”; o relaciones de “no me entretengas mucho que tengo una vida social estupenda y tengo que saludar a aquél de allí”